Tres días han transcurrido desde que se perpetro un atentado a la democracia en las elecciones primarias donde hubo una serie de delitos graves que impidieron que el pueblo hondureño en la capital y en la ciudad de San Pedro Sula ejerciera el sufragio en la hora establecida.
El Fiscal General Johel Zelaya anuncio que serian presentados varios requerimientos para deducir responsabilidad a quienes planificaron y ejecutaron este atentado pero hasta este minuto no existe una tan sola acción.
Se percibe que esta en marcha una estrategia para bajarle el gas al escándalo y no responsabilizar al pleno del Consejo Nacional Electoral ni tampoco al Jefe del Estado Mayor Conjunto.








