Desde hace varios meses se advirtió que no era ético, moral y transparente que Rixi Moncada se postulara como pre candidata Presidencial siendo la Ministra de Defensa porque ella quieran o no mantiene un nivel de jerarquía sobre las Fuerzas Armadas, es una mancha en el proceso que la funcionaria no se halla despojado del otro sombrero.
Pero esta situación de Rixi Moncada no es la unica a la que habría que ponerle atención, las esposas de varios funcionarios van de candidatas a diputadas lo que representa un delicado elemento porque sus maridos disponen de presupuesto estatal e influencias para inclinar la balanza en el proceso electoral primario.