Cientos de ex empleados de INSEP se apostaron en las afueras de las instalaciones de la Secretaria de Finanzas y pasaron la fria noche haciendo una vigilia para pedirle a Dios que le ablande el corazón a la Presidenta Xiomara Castro y ordene el pago de prestaciones y sueldos.
Los afectados manifestaron que se estan muriendo de hambre, lamentaron que por sectarismo político los traten asi, varios de ellos aseguraron que son militantes de Libre y que pese a esa situación los condenan a que sus familias no tengan que comer.
Esta situación se desencadeno desde el momento que se creo la nueva SIT y se procedio a liquidar practicamente a todo el personal pero sin pagarles sus derechos.