No existe ninguna autoridad en el país que tenga la capacidad de llamar al orden al cuestionado presidente del Congreso Nacional Luis Redondo quien mantiene por más de cincuenta dias cerrado este poder del estado.
En un hecho sin precedentes el Congreso hondureño se mantiene cerrado porque el titular no es capaz de lograr los consensos necesarios para el nombramiento de las nuevas autoridades del Ministerio Publico, mientras tanto se mantienen paralizados la aprobacion de una serie de leyes entre ellas el proyecto de presupuesto para el ejercicio fiscal de 2024.
Se especula que van a postergar el cierre de la actual legislatura sin embrago el tiempo perdido hasta los santos lo lloran y Luis Redondo podria enfrentar la justicia porque al final el es responsable de este escenario caótico en el legislativo hondureño.