El dictador nicaragüense, Daniel Ortega, defendió los resultados de las votaciones del domingo 6 de noviembre, argumentando que demostraron que la mayoría de nicaragüenses “votaron por la paz y no por partidos políticos”, y por eso, según el dictador, es que su partido, el Frente Sandinista, se adjudicó el 100% de las alcaldías de Nicaragua.
“Podemos decir que es un hecho histórico que en estas elecciones del domingo pasado, porque por primera vez en la historia de nuestro país, el pueblo depositó su voto pensando en el bienestar de la familia, y no pensando en partidos políticos, en tanto están convencidos de que el partido político al que ellos pertenecían no había hecho nada y no quedaba más camino que seguir votando por el Frente Sandinista”, aseguró Ortega.
“La gente está cobrando conciencia, incluso aquellas que tienen otra bandera política. En los 17 años (en alusión a los Gobiernos democráticos de 1990 a 2007) tuvieron alcaldes por todos lados, ¿y que hicieron?, nada. En cambios, estos alcaldes sandinistas, desde el 2007, han continuado haciendo más obras”, añadió.
La dictadura de Ortega y Rosario Murillo se adjudicó todas las alcaldías de los 153 municipios de Nicaragua, según los reportes del Consejo Supremo Electoral (CSE), controlado por operadores orteguistas. Estas votaciones no contaron con la participación de verdaderos políticos opositores, ni ningún tipo de observación electoral.