Desmembrados, empaquetados, asesinados en términos generales han sido los dramáticos hallazgos que en los últimos días han impactado a la sociedad hondureña, pero como siempre a pesar de lo dantesco de la situación a la clase política en especial a los «grandes» lideres de las fuerzas mayoritarias estos temas pasan desapercibido.
El desinterés es tal que no existe la mínima proclama al respecto mientras miles de familias pasan luto y dolor al perder de forma violenta a un familiar, sobre este particular defensores de los Derechos Humanos son del criterio que cuando ocurren asesinatos con estos patrones terroríficos se podría estar ejecutando una misión de exterminio.
La agenda política en la actualidad y como siempre es solo para sus intereses y priva el enfilar baterías la aprobación de una nueva ley electoral que estaría estructurada precisamente para resguardar la criminalidad política del país.