Los hondureños sufren de nuevo un duro golpe a su seguridad ciudadana tras confirmarse este jueves que el Sistema Nacional de Emergencias 911 no tendrá la capacidad integral para atender llamados de auxilio, luego de que se ha interrumpido la relación contractual con la empresa intermediaria de este servicio.
El 911 a través de un comunicado reveló que el integrador no aceptó una propuesta que se le hizo de nueva negociación al contrato con el propósito de reducir los elevados costos.
Los argumentos que esgrime el gobierno es que la anterior administración suscribió un contrato por 150 millones de dólares, pero se ha observados vicios de la unidad con un cobro mensual de 1.8 millones de dólarescomo soporte y el mantenimiento de la red que es rentada a un servidor primario.
Pese a estos argumentos de los funcionarios del 911, el Gobierno de Xiomara Castro podría enfrentar una demanda millonaria por esta empresa servidora del sistema al pretenderse modificar un contrato que ya quedó establecido.
Lo lamentable de todo esto es que la población hondureña estará sujeta a asaltos, violaciones, y atentados criminales porque las cámaras de vigilancia no estarían a un 100% habilitadas, según los expertos consultados al conocer de este impase que se presenta en la operación del funcionamiento del 911.