por muchos años el bipartidismo fue el responsable de los grandes retrocesos en materia política, social, económica etc. hoy en día existe un tripartidismo y el panorama es igual o peor, no existe la voluntad de parte de la supuesta nueva fuerza para que las reglas cambien.
Desde el ultimo proceso electoral donde se genero una profunda crisis por un supuesto fraude que habría sido víctima una alianza de oposición, se supone que la necesidad de nuevas reglas, una nueva ley que rigiera un proceso transparente que permitiera tener confianza en el respeto a la voluntad popular debería ser prioridad, sin embargo no ha sido así, los responsables de impulsar desde el día uno este objetivo se han acomodado, entregado al oficialismo y sus planes, no han movido un tan solo dedo para que el país cuente con una nueva ley electoral y peor aun están anunciando retirarse de la contienda si no existe un nuevo censo y una nueva cédula de identidad, elementos importantes pero no determinantes, lo toral es la reelección y una segunda vuelta, pero sobre estos temas solo se habla en foros y en debates infructuosos.